Machu Picchu (del
quechua sureño machu pikchu, «Montaña Vieja») es el nombre contemporáneo que se
da a una llaqta —antiguo poblado andino— incaica construida a mediados del
siglo XV en el promontorio rocoso que une las montañas Machu Picchu y Huayna
Picchu en la vertiente oriental de la cordillera Central, al sur del Perú y a
2490 msnm, altitud de su plaza principal. Su nombre original habría sido Picchu
o Picho.
Machu Picchu es
considerada al mismo tiempo una obra maestra de la arquitectura y la
ingeniería. Sus peculiares características arquitectónicas y paisajísticas, y
el velo de misterio que ha tejido a su alrededor buena parte de la literatura
publicada sobre el sitio, lo han convertido en uno de los destinos turísticos
más populares del planeta.
El área edificada en
Machu Picchu es de 530 metros de largo por 200 de ancho e incluye al menos 172
recintos. El complejo está claramente dividido en dos grandes zonas: la zona
agrícola, formada por conjuntos de terrazas de cultivo, que se encuentra al
sur; y la zona urbana, que es, por supuesto, aquella donde vivieron sus
ocupantes y donde se desarrollaron las principales actividades civiles y
religiosas. Ambas zonas están separadas por un muro, un foso y una escalinata,
elementos que corren paralelos por la cuesta este de la montaña. Una parte
apreciable de las ruinas que se pueden ver en la actualidad son en realidad reconstrucciones
recientes, como se aprecia al comparar las imágenes obtenidas en la década de
1910 con las actuales.
El día 7 de julio de
2007, Machu Picchu resultó elegida como una de las nuevas siete maravillas del
mundo moderno, una iniciativa privada de New Open World Corporation (NOWC),
creada por el suizo Bernard Weber, no necesitando el aval de ninguna
institución o gobierno para proseguir con sus fines electorales y permitir
seleccionar las maravillas clasificadas por la votación de más de cien millones
de electores. Esta votación fue apoyada por el gobierno de Alan García Pérez, a
través del Ministerio de Relaciones Exteriores y el del sector Turismo; esta
difusión tuvo sus frutos en una gran participación del pueblo peruano en su
conjunto y también en el ámbito internacional. Al conocerse los resultados, el
presidente Alan García declaró por decreto supremo, el 7 de julio como
"Día del Santuario histórico de Machu Picchu", para recordar la
importancia del santuario para el mundo, reconocer la participación del pueblo
peruano en la votación y promover el turismo.